En tiempos donde la recesión económica y la escasez de recursos sigue afectando de forma directa y negativa al sector empresario de España y de toda la región, es evidente que aquellas personas que son propietarias o que están al frente de la administración de una empresa necesitan agudizar el ingenio y elegir las estrategias más convenientes para mantener el proyecto a flote, evitando caer en la bancarrota y en el cierre definitivo del emprendimiento. En este panorama, está claro que aquellas empresas consideradas pequeñas y medianas resultan las más afectadas, a raíz de que no pueden alcanzar un nivel de ventas y de transacciones que se acerque a lo mínimo necesario, viéndose en la obligación de dar por terminado lo que para muchos es el sueño de toda una vida. De todas formas, la realidad nos demuestra que antes de que esto suceda, existe hoy la oportunidad de acceder a diversas estrategias de marketing y de comercialización que deben ponerse en marcha para mantener la empresa en funcionamiento, ajustando cada una de estas a los tiempos que corren y a los gustos y comportamientos de los clientes.
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