Los españoles pasamos una media 3 horas y 40 minutos al día conectados al móvil, lo que multiplicado de lunes a domingo suman más de 25h a la semana, según el informe Digital Consumer by Generation.
Para analizar el impacto de todo este tiempo de consumo digital en nuestra salud mental, un grupo de investigadores de la Universidad de Oregón (Estados Unidos) acaba de anunciar que utilizará la aplicación Google Health Studies para analizar como utilizan los usuarios sus smartphones y discurrir como se puede asegurar un futuro en el que los dispositivos y productos digitales hagan a la gente más feliz, sin caer en la dependencia.
En su trabajo, medirán factores como el sueño o la actividad física, para lo que usaran, también, los datos recopilados por Fitbit, las pulseras de actividad propiedad de Google.
Uno de los investigadores que lidera el ensayo, el doctor Nicholas Allen ha recalcado que "algunos estudios similares al que están a punto de iniciarse aproximan a condenar la tecnología basándose en su convicción de que esta debe ser mala para la salud mental y el bienestar". Por ello, cree positivo una investigación que no solo se centre en los efectos potencialmente dañinos del uso de los dispositivos, sino que también tenga en cuenta los beneficios que estos ofrecen.